Las frutillas están espectaculares y hay que aprovechar. Estoy un poco reiterativa con los postres color rojo, pero es que me pueden todos los frutos dentro de esta gama de color. Frutillas, arándanos, frambuesas...lástima que las últimas no sean tan fácilmente encontrables.
Bueno, siguiendo con la onda de, invento a medida que voy manejando los ingredientes, salió esta tartita de frutillas, muy fresca, una variante a la que lleva gelatina en la parte superior.
Cortar en cuartos unos 400 gr. de frutillas previamente lavadas.
Colocarlas a macerar en un bowl junto con 2 Cdas. generosas de algún dulce de frutos rojos, en su defecto pueden ser de azúcar (rubia queda más rico) y unas gotitas de jugo de limón.
Yo lo que tenía en la heladera era: una mermelada de arándanos casera que tenía mucho almibar y un frasquito de jalea de frutos rojos, así que mezclé ambas incluyendo arándanos enteros de la mermelada.
Se deja macerar una media hora más o menos. Puede ser más tiempo, yo la verdad las dejé más porque iba mechando con otras cosas, sin apuros.
Triturar
1 paquete (aprox. 200 gr.) de galletitas de chocolate
Mezclarlas con unos 40 a 50 gr. de manteca derretida hasta que se humedezcan.
Se puede agregar un puñado de almendras, avellanas o nueces picadas para darle un toque.
Colocar en fondo de una tartera y compactar bien. En este caso no usé tartera de fondo desmontable.
Llevar al frio mientras preparamos el resto.
Hacer una crema pastelera, yo usé esta receta:
Mezclar en una olla:
4 Cdas. de maizena
1/2 taza de azúcar
Disolver en 1 taza y media de leche fría.
Llevar al fuego a baño maría, revolviendo constantemente.
Agregar un trozo de cáscara de limón o unas gotitas de escencia de vainilla.
En un bowl aparte, batir apenas con tenedor 2 huevos e ir agregando de a poquito crema pastelera, revolviendo constantemente para que no se cocinen. Yo agregué más o menos 1 Cda. de crema.
Incorporar la mezcla de huevos a la crema pastelera, a fuego bajo y revolviendo constantemente.
Cocinar unos minutitos más y retirar del fuego.
Retirar la cáscara de limón.
Debo de admitir que a mi me quedaron grumos así que al sacarla del fuego le apliqué el minipimer y pronto, quedó bien lisita.
Colocar la crema sobre la base de fondo de migas y llevar al frío.
Colar las frutillas, reservarlas y colocar el jugo del macerado en una olla chica. A mi me salió el equivalente a un 1/4 de taza, pero estas cantidades pueden variar mucho según como esté la fruta, el tiempo de macerado, la cantidad de mermelada que usamos.
Mezclar el jugo con 1 Cta. de maizena y llevar a ebullición para apenas espesar.
Disponer las frutilllas sobre la crema pastelera.
Dejar enfriar un poco el jugo de la fruta que espesamos e ir virtiéndolo delicadamente sobre las frutillas. No es conveniente que esté demasiado caliente porque el calor puede ocasionar que se raje la crema pastelera.
Llevar a la heladera. Decorar con hojitas de menta fresca.
Esta tarta al servir se puede desmoronar, es así, a no preocuparse demasiado, también es ideal para hacer en vasitos individuales tipo postrecitos.
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